Al llegar al lugar, los guías se presentaron y
vimos un “corto” sobre la vida de Ana.
Luego Fernando, uno de los guías, quien nos acompañó durante el museo, nos
explicó sobre el Holocausto, Adolf
Hitler, la crisis de ese momento y la vida de la familia Frank, en una sala donde
se exponen imágenes sobre el contexto y los Frank. También nos contó sobre “La
casa de atrás”, que fue el escondite de la familia Frank y los Van Pels quienes
compartieron el lugar con Ana,su hermana y sus padres.
Estuvimos en otra sala donde el guía nos explicó el significado de
“La noche de los lápices”, vivida por estudiantes que reclamaban el boleto
estudiantil. Después pasamos a la habitación que fue ambientada como lo que había sido “la cocina y la habitación de Ana
en la casa de atrás”; ahí pudimos observar una réplica del diario de Ana.
Y por último observamos en el jardín del museo un retoño del castaño que fue traído de la casa de Ana en Ámsterdam.
Con esta experiencia aprendimos que por tener una
ideología y religión diferente se cometieron muchos crímenes injustos.Y por último observamos en el jardín del museo un retoño del castaño que fue traído de la casa de Ana en Ámsterdam.
Pienso que a Ana le habrá sido difícil llevar todo ese peso durante los años de su vida, sintiendo el dolor propio y de los que la rodeaban. Ana, como muchos jóvenes que vivieron experiencias semejantes, es un ejemplo de vida, de persona y de mujer. Ella, desde su diario, nos deja un mensaje imposible de olvidar: debemos respetar al otro sin importar origen, religión, aspecto.
Valentina Roig
2°año “A”
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